Calle Real

En esta calle podemos observar numerosas casas de estilo marinero.

 

Son construcciones de tres pisos, en los que la planta baja se utiliza como bodega, el primer piso como vivienda, mientras que en el segundo piso se localizan las habitaciones. La entrada a las casas se realizaba a través de las bodegas, o bien por la parte trasera de los edificios directamente al primer piso, debido al desnivel del terreno. Casi todas las casas tenían instaladas en sus bodegas pozos de salazón como forma de subsistencia. En estas bodegas, los pescadores incluso criaban cerdos durante la época que no salían a la mar debido al mal tiempo, para luego venderlos en el mercado de Colunga. Estos cerdos tenían mala venta, ya que los tratantes de ganado no los querían debido a que, según ellos, tenían sabor a saín (a pescado).